Hola,
cada día que pasa estamos más concienciados de protegernos del sol durante todo el año pero sobre todo en verano. El rostro es la parte del cuerpo que más exponemos a las radiaciones nocivas del sol, también es la zona más delicada del cuerpo y con necesidades más específicas, según nuestro tipo de piel, fototipo, texturas que mas nos gustan, si vamos a la playa, a la montaña o como protector solar diario.
Protegernos del sol no es solo cuestión envejecimiento prematuro o aparición de manchas, es proteger nuestra salud, evitando daños irreversibles. por eso necesitamos acudir a firmas en las que confiemos plenamente y a formulas eficaces, que además nos aporten propiedades beneficiosas a la piel.
Hoy vengo a hablaros de Laviderm Dermocosmética, la linea de alta cosmética de los Laboratorios Lavigor, que combina ciencia y naturaleza para el cuidado de la piel. La linea solar de Laviderm nos ofrece un tratamiento solar de vanguardia, formulado fundamentalmente para proteger el ADN celular de las agresiones externas producidas por la radiación solar y evitar tanto el cáncer de piel como el fotoenvejecimiento. Es ideal para todo tipo de pieles, inclusive las más claras y sensibles.
- Ácido hialurónico: su función principal es mantener la piel lisa e hidratada, ya que es capaz de absorber hasta mil veces su peso en agua. Además, sirve como soporte del colágeno y de las fibras de elastina.
- Centella asiática: sus acciones principales son la cicatrizante, la regeneradora, y la renovadora, por ser capaz de estimular la activación fibroblástica y la producción de colágeno. Al mismo tiempo, desarrolla una importante actividad antiinflamatoria y circulatoria, ya que protege y refuerza los vasos sanguíneos, por su alto contenido en flavonoides. Por ello, aumenta el aporte de nutrientes y la oxigenación de la piel, a la vez que ayuda a su depuración.
- Té verde: aporta taninos, polifenoles, vitaminas, bioflavonoides y oligoelementos como el flúor o el zinc, que le proporcionan propiedades protectoras y estimulantes del metabolismo cutáneo. Actúa, junto a la vitamina E, como filtro solar biológico por su alta capacidad antioxidante.
- Agua de hamamelis: por su riqueza en flavonoides y taninos, tiene propiedades astringentes, hemostáticas, antiinflamatorias, bactericidas y vasoconstrictoras.
- Sauce: fuente natural de ácido salicílico, por lo que posee acción renovadora, depurativa, reguladora de la secreción sebácea y antiséptica, al mismo tiempo que relaja las inflamaciones.
- Vitamina E: potente antioxidante de demostrada eficacia que actúa como filtro solar biológico, por combatir el estrés oxidativo en los tejidos. Además, favorece la reparación de la piel.
- Vitamina F: constituida por tres ácidos grasos esenciales, estimula la actividad celular, participa en la barrera cutánea, evita la pérdida de agua transepidérmica y aporta efecto calmante.
La crema solar es esencial para proteger nuestra piel de los daños causados por los rayos UV. Su aplicación diaria no solo previene quemaduras, sino que también contribuye a mantener una piel saludable y joven.
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